viernes, agosto 24, 2007

Rozándome

En tus brazos,
donde las colinas de mis pechos
alcanzan las cumbres del placer de tus manos,
y las mañanas en mi cama,
son recuerdos en las horas de tu ausencia;
donde tus pieles,
son el abrigo de mi alma,
y los susurros,
las mieles de los cánticos de tu boca;
donde tus besos,
son los regalos perpetuos
de las tardes grises,
y tus manos
el roce de la mascara de mi alma;
allí,
donde sólo alcanzan los amores esperados,
donde, mis sueños caminan de tu mano,
y los miedos, cayeron rodando
por las espirales del pasado,
allí,
sentado, entre el abismo de la que fui
y el principio de la que soy,
pacientes,
descansan los sentidos de mi ser,
esperando llegar a ser tu amada.

martes, agosto 21, 2007

En tus profundidades







En la penumbra de mi cuarto,
donde me regalas
los sueños que nacen de mi vientre;
donde,
entre las palmas de tus manos,
yace mi cuerpo resucitado de ti;
donde,
la impaciencia de tus palabras
halagan mis miedos;
donde,
se entierran los recuerdos
y resurge mi yo;
donde,
el amor es infinito,
y el deseo solo se colma con amor;
donde,
nos fundimos en las profundidades,
encontrándonos;
donde,
el tiempo es eterno,
y solo se cuentan los besos;
donde,
yo soy yo,
y tú,
mi aliento;
donde,
las palabras son mudas,
y las miradas hablan;
donde,
te ame tanto esta tarde...
ahora,
cuando sólo me cobija el silencio,
me abrazo a tu aroma,
me recorre el cuerpo...
y entre mis sabanas
siento tu aliento,
empapada de ti,
se cubre mi cuerpo,
y mis manos,
mi boca,
mis ojos,
mi lengua,
reclaman tu olor,
en la habitación de los sueños...

viernes, agosto 17, 2007

Sueños de princesa



















En la lejanía,
donde los sueños de princesa,
quedan esparcidos por las tinieblas,
y las esperanzas,
se refugian en los horizontes inalcanzables;
donde,
la espera se retuerce en los espirales del ayer,
y caen rodando por las escaleras del mañana,
los ideales del querer.
Allí,
en el abismo de lo que fue,
el principio de lo que es,
y la ilusión de lo que será
se encuentran nuestros miedos,
ocultos entre el fuego de la pasión,
entre los algodones de la ternura,
con los toques de la sin razón.
Y se me acongoja el alma,
se me rompe el pecho,
y no entrego palabras,
se me eriza mi piel,
con el roce de tu mirada.

lunes, agosto 13, 2007

Mañanas en tus besos

Fiel compañero de momentos duros
de senderos por andar,
de sentimientos nunca escritos,
perdidos en mi recuerdo,
nacidos de tu amor,
esperas,
que lo sentido
en las noches en tu alma,
rocen lo sentido
en mis noches de tormentas
por amores no reales,
ideales de un querer;
sin saber,
que las palabras son escasas
cuando el alma rebosa de vos.
Caí en el abismo de los cuerpos,
que gritan compasión por su ser,
Ahora,
en el despertar de tus mañanas reales,
las que inundan mi alma
con tus besos,
las que recorren mi cuerpo
con las yemas de tus dedos,
erizando el mas cuerdo sentimiento,
con los sabores a tu miel,
anhelo,
el despertar diario de tus besos
la mañana que no los saboreo.

En ti...

Entre tus brazos,
pasean las libélulas del miedo,
revoloteando, perdidas
entre la incertidumbre del mañana;
entre ellas,
tus amores del tiempo esperado,
tardio en mis carnes,
prematuro en mis pecados.
Y es tal,
este sentimiento tan osado,
que rebuzno entre besos
los errores del pasado.
Y las palabras,
pecan por su ausencia,
embriagadas por el silencio perpetuo
de las heridas aun marcadas.
Esta noche,
mi luna lloraba
porque no pudo rozar tu alma...
y mis pieles añoraban tus besos,
que alimentan mi calma
descubren mis miedos,
y aman mi alma....

domingo, agosto 05, 2007

Profundidades

Profunda mirada,
que clavas tus ojos en el abismo,
entre el amor y mis deseos,
que rozas con las yemas de tus dedos
el horizonte de mi cuerpo;
recorres los senderos
que otros amantes persiguieron,
y ahora te entrego,
pura y limpia de todo recuerdo.
Mi silencio,
atraviesa las barreras del miedo,
destruye ideales,
lanza mensajes al mundo cuerdo
de los perdidos en las profundidades;
y en la miseria
renace el alma que ven los ojos
del que ama mis inseguridades.

viernes, agosto 03, 2007

Labios de miel...


La esperanza de los recuerdos pasados
desaparece en las tinieblas del olvido,
ahora perennes en mi memoria
los dolores del cautivo.
No ansío llenar en mí los vacíos
de los amores pasados,
no me sacian los huecos podridos
por los temores del ayer;
ya no mengua mi medio lado,
por los dulces de las bocas del olvido,
con los labios con sabor amapola
y las pieles curtidas por sus descuidos.
Ya no busco calmar las dudas del porqué,
del cuando, o que fue;
ahora, renazco entre las hiedras,
enroscándose entre mis piernas,
colmando los sabores con las mieles de tus manos,
con tus pieles rozándome el alma
y perdiéndome en la mirada del mañana...